HISTORIA DEL EKEKO?
EL EKEKO VIVIÓ EN LOS NEVADOS
Los
nevados de la cordillera Occidental y Oriental de Bolivia fueron el
hogar de muchas personas pequeñas. Estas montañas que rascan las nubes
andinas sirvieron de hogar a hombrecillos pequeños en tamaño, pero con
un olfato muy desarrollado.
Enterados de estos dones, los españoles
les conquistaron con frutas y comida para que detecten con su olfato los
tesoros escondidos de los pueblos originarios. Sin embargo, los curas,
quienes en su afán de enriquecerse, los utilizaban como guías para
detectar el oro y la plata, nunca los castigaban, eran muy estimados,
por eso su carácter pacífico y sensible.
La codicia de sus amos, no
tuvo limites, fueron trasladados de ciudad en ciudad; de los valles al
altiplano, lo que provocó que en poco tiempo contrajeron enfermedades
que no pudieron curar. No pudieron aguantar los males y sus pequeños
cuerpos sucumbieron para ser enterrados en grandes chullpares, junto a
sus riquezas y pertenencias, nadie se atrevía a profanar estas tumbas ya
que los gases contenidos eran venenosos y podían contagiarse de la
mortal enfermedad que los exterminó.
Los sobrevivientes, abandonados
por sus circunstanciales amigos, con mucha hambre y tras una larga
enfermedad, bajaron de las montañas en busca de alimentos.
Muy pronto
se percataron de su presencia, eran gordos, pequeños y venían cargando
sus pertenencias. Llevaban a cuestas sus ollitas, latitas y ropas
amarrados con pita (cordones de hilo).
Las khateras o vendedoras de
los mercados empezaron a endiosarlos, se dieron cuenta que si a estos
hombres les daban de comer, les iba bien en la venta, sobretodo en sus
ganancias.
No se sabe cuando murieron, pero comenzaron a aparecer
cientos de estatuillas, trabajadas en piedra, arcilla y yeso, a los
cuales le dieron el nombre de Ekeko y son adorados con mucha devoción,
“Estuvieron en vida aquí, ahora han sido reemplazados por los detectores Electronicos".
Fuente: http://cultospopulares.blogspot.com/2008/02/historia-del-tata-ekeko.html
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